La estación “Central Obelisco” concentra la mayor cantidad de pasajeros del sistema de subterráneos de Buenos Aires y registra la mayor variedad de combinaciones entre distintas líneas. Antes de la pandemia se estimaba que alrededor de 300.000 personas circulaban diariamente por esta estación.
Si bien el numero de usuarios de subtes disminuyó después de la pandemia, lo cierto es que actualmente, el número de usuarios está en proceso de recuperación, acercándose progresivamente a los niveles previos lo que refleja una reactivación del servicio ofrecido por Subterráneos de Buenos Aires.
Esta finalización de obra concluye la tercera etapa de un proyecto dividido en tres fases. La primera etapa, concluida en 2019 y habilitada en agosto de ese año, consistió en la apertura del nuevo acceso “Central Obelisco” por la calle Sarmiento al 800. Como resultado, se clausuraron los accesos anteriores ubicados en la avenida Nueve de Julio y en otras partes de la estación “Diagonal Norte”.
Esta etapa incluyó la construcción de un nuevo vestíbulo con boletería, así como un pasillo peatonal que conecta el andén de la estación “Nueve de Julio” (sentido Catedral) de la línea D con el andén de “Diagonal Norte” (sentido Constitución) de la línea C, además de un acceso equipado con ascensores, escaleras mecánicas y peatonales.
Se construyó un nuevo pasillo peatonal destinado a facilitar la conexión entre los pasajeros que combinan entre las tres líneas. Este pasillo se ubica paralelo al andén con sentido a “Catedral” en la estación “Nueve de Julio”. Gracias a esta obra, los usuarios que combinen entre las líneas B y C podrán evitar circular por el andén de la estación “Nueve de Julio” de la línea D.
Este proyecto contribuye a disminuir la densidad del tránsito de pasajeros al facilitar el acceso a las combinaciones entre líneas. Además, se ampliaron los andenes tanto de esta estación como de “Diagonal Norte”.
En resumen, la culminación de estas tres etapas de obra en la estación Central Obelisco representa un avance significativo en la modernización y optimización del sistema de subterráneos de Buenos Aires. Las nuevas infraestructuras y accesos facilitan la circulación de los pasajeros con la cual mejoran las combinaciones entre las líneas B, C y D de tal modo que contribuyen a descongestionar los espacios.
No obstante, la incorporación de ascensores y la ampliación de andenes reflejan un compromiso con la accesibilidad y el confort de los usuarios, reforzando el objetivo de ofrecer un servicio más eficiente y cercano a las necesidades de la población.
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